Nacido en 1946, diseña sillas desde muy joven, aprendiendo a transformar ideas en diseños e implementarlas. La más mínima irregularidad o falla técnica lo motiva a mejorar y descubrir las soluciones más ingeniosas.

Podemos decir que maduró junto con sus productos. Tras aprender técnicas y perfeccionar sus habilidades, fundó la empresa Midj en 1988, combinando con éxito ambas cualidades.

Gracias a Paolo, Midj ahora es conocido en todo el mundo. Viaja mucho, adquiere conocimientos, aprende y aporta experiencias, así como habilidades de gestión y creatividad a la empresa.

Aunque las sillas siempre han sido una parte fundamental de su vida, no ha dejado de interesarse por el gusto y el estilo contemporáneo: además de sillas como “Nenè” y “Zelig”, también diseña mesas como “Bond”.

Prefiere líneas sencillas y elegantes para sus proyectos de diseño, que se adaptan a todo tipo de ambientes de hostelería y hogar, especialmente los contemporáneos, y hacen que sus productos sean siempre best sellers.

A la hora de dibujar, presta una atención meticulosa a las características técnicas y de diseño que permiten una excelente relación calidad-precio: es el único diseñador que sabe combinar creatividad y tecnología, que suelen ser dos áreas separadas que no coinciden fácilmente.

Supo potenciar su talento natural y estableció una empresa exitosa gracias a sus cualidades: tenacidad, determinación, energía, clarividencia, gran imaginación y curiosidad, que caracterizan sus infinitas soluciones en estilo y diseño.